Abstract
El objetivo de este trabajo fue identificar cómo las políticas neoliberales instrumentadas en las universidades han configurado condiciones laborales precarias, donde la interacción humana se torna conflictiva y difícil y sienta las bases para el desarrollo del burnout, el cual es entendido como una respuesta frente al estrés laboral crónico que incluye agotamiento, despersonalización y falta de realización personal, y que se ha constituido en uno de los trastornos que mayor impacto están teniendo sobre la salud de los trabajadores académicos.